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| Fuente: Quito Turismo |
Desde el 6 de febrero de este año, la capilla del milagro de
La Dolorosa muestra al público sus piezas religiosas inéditas, entre las cuales
está el cuadro que hace 112 años fundó el milagro de la Virgen de la Dolorosa.
La disposición de la congregación Jesuita y la gestión del
Municipio de Quito, a través de la Empresa Quito Turismo, permite que la
ciudadanía pueda admirar este símbolo de la religiosidad quiteña.
En base a informes y estudios realizados por la comisión de
Áreas Históricas se aprobó la construcción de una puerta de acceso en la
calle Benalcázar y Sucre. Los trabajos de la capilla, que se ubica en la parte
posterior del convento jesuítico, empezaron en el 2011 y ahora ya se encuentran
terminados y listos para recibir a los visitantes que deseen admirarlo.
El ingreso a esta capilla es gratuito y se lo realiza por la
calle Benalcázar N3-76, entre Espejo y Sucre. Por el momento está abierta de
18:00 a 19:00 para la celebración de la misa diaria, pero posteriormente se
espera que este horario se extienda para que más turistas y quiteños conozcan
esta capilla patrimonial y de importancia para la fe popular por el milagro que
se recuerda.
La imagen a la cual se le adjudica el milagro es una
oleografía con el busto de ‘Nuestra Señora de los Dolores’, la cual muestra a
la Virgen María con el corazón visible traspasado por siete puñales. En su mano
izquierda lleva los tres clavos de la cruz y en la derecha sostiene la corona
de espinas.
El Milagro de La Dolorosa
El 20 de abril del año 1906, 35 estudiantes internos
del colegio San Gabriel se encontraban en el comedor de la institución para
cenar junto a padre Andrés Roesch S.J. y el hermano Luis Alberdi S.J. En ese
momento, uno de ellos notó que la imagen de la Virgen de la Dolorosa, que se
encontraba colgado en la pared, empezó a parpadear. Luego el fenómeno fue
observado por el resto de jóvenes, quienes por curiosidad y por fe se
arrodillaron frente a este prodigio y empezaron a rezar.
El 4 de febrero de 1910, el Señor Arzobispo de Quito
Monseñor Federico González impartió la bendición oficial de la capilla,
acto que explicó claramente el significado del Milagro de la Virgen del Colegio
y se dio finalmente el nombre de El Santuario de la Dolorosa. Este
espacio albergó la imagen del prodigio hasta el año de 1958 cuando el Colegio
San Gabriel se trasladó al norte de la ciudad.
Fuente: Quito Turismo
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